Afirmó que el servicio en el distrito se puede mejorar y justificó los problemas en la atención por los condicionamientos de la pandemia.
“Queríamos estar antes en Carmen de Patagones, pero no pudimos por lo que ya sabemos (el coronavirus), pero ya estamos acá y poniéndonos al tanto de todos los problemas”, dijo.
Por otra parte, anunció un ambicioso plan para San Blas, con el fin de que al menos el 90% de la villa marítima tenga esa agua potable y cloacas en los próximos cuatro años.
Tras las reuniones que mantuvo durante la mañana con autoridades municipales y dirigentes vecinales, el funcionario tenía previsto recorrer la sede local de ABSA, así como otros predios. Entre otras cosas quería observar el estado de los dos tanques de reserva que posee la ciudad, de los cuales sólo funciona el 50% de uno de ellos.
Al mismo tiempo, otra comitiva de ABSA encabezada por el gerente general Julián Bautista, se reunió con los delegados municipales de las localidades de Stroeder y Villalonga, y recorrieron los establecimientos en ambas localidades.