Padre de Lucio Romero, a 7 años de su muerte: "no vamos a bajar los brazos hasta que quien lo mató sea condenado"
La Ciudad18 de julio de 2018"Se cumplen 7 años del fallecimiento de mi hijo. En todo este tiempo, una parte de la justicia nos trató muy mal como familia, a pesar de la pérdida de nuestro hijo, porque en el primer año y medio se archivó la causa porque los fiscales aducían que no tenia Convicción", precisó Romero.
"Fue un año y medio perdido, donde con los vecinos, la comunidad y el patrocinio del doctor Ponce pudimos apelar y poner de nuevo la causa en curso e investigación", añadió.
Luego, la familia entró en distintos procesos que pocas veces fueron a su favor: "se hizo un juicio en 2015, donde al conductor le daban dos años y ocho meses de prisión en suspenso, sin el carnet por 4 años y debía abonar una recompensa de unos 10 mil pesos a un comedor, ahí no asistí",contó Romero, al tiempo que reconoció que el dolor por la pérdida de su hijo no le permitía ver cara a cara al conductor del vehículo que lo atropelló.
Más adelante,relató que "en otro juicio abreviado Castro reconoció que iba fuerte, que a mi hijo lo vio de golpe y lo impactó de atrás. En esa oportunidad las partes se pusieron de acuerdo y se dijo que debía recibir tres años de prisión en suspenso y 8 sin el carnet de conducir, teniendo en cuenta que todos los accidentes son excarcelares".
En el mismo sentido, contó que lo actuado en esa instancia debía ser homologado por el juez Daniel Rojas, quien para asombro e impacto de la familia decidió que a Castro lo liberaran de culpa y cargo.
"Nunca pasa eso según nos dijeron, nunca se nivela para abajo", remarcó indignado el ex dirigente barrial quien comentó que nuevamente se negaron a aceptar la determinación del juez y ya en diciembre de 2017 "salió un dictamen favorable que aprobaba la condena de Castro porque había elementos necesarios".
A partir de allí, la causa recibió la caratula de "Homicidio culposo agravado", y los defensores de Castro presentaron, según Romero, "el último recurso con el que cuentan, apelar ante la Corte Suprema de la provincia".
De los siete años de idas y vueltas, entre el dolor y la búsqueda constante de justicia, Romero resumió: "cuando ocurre una pérdida por un accidente, uno supone que la justicia lo va amparar, pero a siete años de la perdida de mi hijo, sabemos que no es así" e inmediatamente reclamó que "en estos siete años mi hijo está en un nicho y él - por Castro- disfrutando la vida".
"Es difícil pero no vamos a bajar los brazos hasta que quien mato a mi hijo sea condenado", aseguró Romero.
El lunes próximo, la familia, amigos y vecinos de Lucio Romero se convocarán en el lugar donde se produjo el accidente que le costó la vida, donde hace algunos años decidieron colocar una bicicleta para recordarlo y crear conciencia.
"Ahora vamos a poner una estrella amarilla", adelantó Romero y precisó que buscarán crear conciencia para que los conductores "respeten la cartelería de 60 km para circular, y que sean prudentes".