"Sin controles rigurosos la probabilidad de que el hueso de asado transmita el virus de aftosa es total”, afirmó Iglesias
La Ciudad13 de junio de 2016Al respecto, Iglesias explicó que hubo diversas expresiones de distinta autoridades, incluso de SENASA, respecto a la “inocuidad” que tendría el ingreso de hueso plano al área. En este sentido, remarcó un trabajo denominado, “Evaluación cuantitativa del riesgo de introducción del virus de fiebre Aftosa a la zona libre sin vacunación –Patagonia- a través de asado con hueso bovino proveniente de la zona libre con vacunación”, elaborado por la Dirección de Epidemiología y Análisis de Riesgo Dirección Nacional de Sanidad Animal, en octubre de 2011.
“En el trabajo elaborado por Senasa, se partió del supuesto que era insignificante la probabilidad de que se produzca actividad epidemiológica en la zona de vacunación, que un animal contraiga la fiebre aftosa, que en tal caso sea llevado a faena, que no se detecte pre y post morten y, finalmente, que se aloje en la medula ósea del costillar”, precisó Iglesias.
Asimismo, destacó que “las áreas de producción de las provincias patagónicas han objetado en forma recurrente los mecanismos de control y seguimiento aplicados, fragilidad que se ha puesto en evidencia con el ingreso de carne en forma ilegal, llegándose a casos en los que se constató directamente el ingreso de animales vacunados en pie”.
En este sentido, Iglesias explicó que “poco se ha hecho trascender del trabajo al que todos toman como base. En realidad, no habla de la imposibilidad de transmitir la aftosa a través de los huesos planos; por el contario, al analizar la probabilidad de que el virus sobreviva en el hueso de costilla, señala que si el animal está infectado y con viremia, el virus llegará a la medula ósea de los huesos del costillar y el asado resultará infectado.”
Ante esto, el Secretario de Desarrollo Territorial de Patagones destacó que, de acuerdo a dicho informe, las probabilidades resultarán insignificantes siempre que se establezcan controles rigurosos de detección de actividad viral en todos los campos de Argentina en que se vacuna; se denuncie inmediatamente la aparición de un animal enfermo, por ningún motivo ese animal sea enviado a faena; se realicen correctamente los análisis pre y post morten en los frigoríficos y que en todos los casos los huesos ingresados sean cocidos. Hasta tanto esto no se cumpla, la probabilidad de que el hueso de asado transmita el virus de aftosa es total”, concluyó Iglesias.