(AUDIO) Carniceros del distrito afirman que se ven perjudicados por el frigorífico de Cagliero

Una inédita situación se vive en el distrito de Patagones entre el sector de la carne y sus trabajadores.

Artemio Álvarez, dueño de la despensa El Familión, tuvo que cerrar su carnicería debido a que, tras la llegada del frigorífico de ovinos ubicado en Cardenal Cagliero, ya no pueden traer más carne desde los campos.

Se debe a que justamente, la venta de ovinos era uno de los puntos más altos en su carnicería y, en ese sentido, Álvarez también acusa que los montos para faenar dentro del frigorífico son muy altos.

En esa línea, y en conversación con FM DE LA COSTA, Álvarez dejó entrever varias situaciones; ante todo, su descontento con lo que sucede con el frigorífico.

No obstante, detalló que uno de los cinco socios pertenecientes a la cooperativa a cargo del frigorífico sería el hijo del secretario de Gobierno, Héctor Otero; y que bajo su consideración, el ex intendente José Luis Zara y los propios socios podrían haber llegado a un "acuerdo por fuera", para terminar con la faena clandestina.

Ante el medio radial, relató que "el problema suscitó en que, por ejemplo, hay cinco carniceros que carnean en el matadero de Cagliero, pero en realidad, no nos abastecen. Desde que se abrió el matadero, nunca me ofrecieron nada. El otro día, con una nota que me hicieron, me llamaron y un hijo de, me ofreció cordero, pero durante todo ese tiempo no".

En ese sentido, indicó que "hubo un momento en donde entre un grupo de carniceros teníamos el número de todos. En el partido, somos cerca de cien y algo las carnicerías en total, pero resulta que hay solamente cinco, el resto bien gracias".

Agregó que "a mí me vinieron a ofrecer en un momento a un precio de 1500, y yo tengo que sacarle mi ganancia, pero ellos le ponen a 1450 en su carnicería. ¿A quién le voy a vender entonces?".

Respecto al frigorífico, Álvarez precisó que "es un predio que ni siquiera es municipal, es del ferrocarril. Es un arreglo que hicieron cuando estaba la gestión de José Luis Zara, y ahí se revolucionó todo. Él quería cortar la faena en el campo, se hizo una reunión y quedó todo mal".

Contó luego que "el otro día fui al campo a hacer un trabajo, y vi el camión que salía del espacio de uno de los carniceros, con animales carneados en el campo, es decir, no pasaron por el frigorífico, y no lo hace solamente un carnicero".

Consultado sobre si existe una posible solución al tema, consideró que "por lo que me plantean a mí, no la tiene. Ellos nos cobran 4500 pesos para faenar un lanar en el frigorífico de Cagliero, pero no es solo eso, nosotros tenemos que ocupar un vehículo que nos lleve los animales desde el campo hasta allá, porque tiene que estar habilitado. Los costos son altísimos, y eso es lo que molesta a uno".